Cuando las palomas se instalan en los balcones, los techos o en los jardines, muchas personas buscan soluciones rápidas para mantenerlas alejadas. Entre los remedios caseros más mencionados se encuentran las bolas de naftalina. Pero, ¿son realmente eficaces contra las palomas o se trata simplemente de un mito persistente? Antes de esparcirlas alrededor de su propiedad, es importante comprender su verdadera eficacia, los riesgos que presentan y las alternativas más seguras que pueden ofrecer mejores resultados.
¿Qué son las bolas de naftalina?
Las bolas de naftalina son pequeñas bolitas sólidas que se utilizan tradicionalmente en el hogar para proteger la ropa y los tejidos de los daños causados por los insectos. Para entender su posible efecto sobre las aves, y en particular para responder a la pregunta «¿Las bolas de naftalina ahuyentan a las palomas?», es esencial conocer su composición y su modo de uso.
Composición de las bolas de naftalina
Las bolas de naftalina contienen naftaleno o paradiclorobenceno, dos pesticidas que liberan un gas tóxico capaz de eliminar polillas e insectos. Aunque son eficaces para este uso, siguen siendo peligrosas para los seres humanos, los animales y la fauna, razón por la cual existen advertencias estrictas sobre su utilización.
Usos típicos de las bolas de naftalina
Las bolas de naftalina nunca fueron diseñadas como un medio de control de plagas universal. Su uso adecuado se limita a pequeños espacios cerrados donde los vapores pueden acumularse sin riesgo para las personas o los animales. Los usos más comunes incluyen:
- Protección de la ropa almacenada: colocadas en armarios, cajones o recipientes herméticos para prevenir ataques de polillas.
- Conservación de textiles y tejidos: utilizadas con mantas, alfombras o muebles tapizados cuando se guardan por un tiempo.
- Prevención de ciertas infestaciones de insectos: eficaces contra polillas, lepismas y algunos otros insectos en espacios confinados.
Fuera de estos contextos específicos, las bolas de naftalina pierden rápidamente su eficacia y presentan más riesgos que beneficios, especialmente cuando se usan incorrectamente al aire libre para intentar ahuyentar palomas.
La idea de que las bolas de naftalina ahuyentan a las palomas
Como las bolas de naftalina desprenden un olor fuerte y persistente, muchas personas creen que ese aroma basta para mantener alejadas a las palomas. El razonamiento es sencillo: si los vapores logran ahuyentar a las polillas y a los insectos, también podrían incomodar a las aves. Esta creencia se ha extendido ampliamente, y algunos propietarios esparcen bolas de naftalina en balcones, tejados o jardines con la esperanza de crear una zona libre de palomas.
En la práctica, sin embargo, las palomas son mucho menos sensibles a estos vapores que los insectos. Pueden evitar temporalmente un lugar con un olor muy intenso, pero el efecto generalmente no dura mucho.
Lo que dicen la ciencia y los expertos sobre la idea de que las bolas de naftalina ahuyentan a las palomas
Cuando se busca saber si las bolas de naftalina realmente pueden ahuyentar a las palomas, resulta útil examinar lo que dicen los investigadores, las autoridades de control de plagas y las directrices oficiales. A continuación se presenta una visión equilibrada basada en estudios científicos y opiniones de expertos:
➡️ Un estudio sobre el naftaleno (la sustancia activa de las bolas de naftalina) realizado en el contexto de experimentos sobre depredación de nidos mostró que las bolas de naftalina no impedían que los depredadores mamíferos retiraran los huevos. Aunque no se refiere directamente a las aves, ilustra los límites de la idea de que “un olor fuerte ahuyenta a todos los animales”.
➡️ En el boletín técnico del USDA titulado “Bird Dispersal Techniques”, el naftaleno (es decir, las bolas o escamas antipolillas) se menciona entre las sustancias que a veces se sugieren para alejar a las aves, pero los autores precisan que las pruebas no lograron disuadirlas (especialmente a los estorninos) de los lugares tratados.
➡️ El boletín de extensión de la Universidad de Florida sobre palomas indica que repelentes como el naftaleno son “raramente eficaces y nunca constituyen una solución permanente”. Además, las concentraciones necesarias para ahuyentar palomas resultan molestas para los humanos y los animales domésticos.
➡️ Los especialistas de la Universidad Estatal de Oregón recuerdan que las bolas de naftalina son pesticidas y deben utilizarse únicamente en los usos autorizados (por ejemplo, en armarios o recipientes herméticos), nunca en exteriores ni contra animales como las palomas. Un uso inadecuado puede representar riesgos para la salud.
➡️ Numerosos profesionales del control de aves desaconsejan utilizar bolas de naftalina en tejados, repisas o zonas abiertas, ya que el viento y el aire libre dispersan rápidamente los vapores. Algunas fuentes especializadas incluso afirman claramente que “las bolas de naftalina y el amoníaco no funcionan para ahuyentar a las aves y son extremadamente peligrosas”.
Los riesgos asociados al uso de bolas de naftalina para ahuyentar a las palomas

Aunque las bolas de naftalina puedan parecer una solución práctica para disuadir a las palomas, su uso fuera de espacios cerrados presenta serios inconvenientes. Estos riesgos afectan no solo a las aves, sino también a las personas, los animales domésticos y el medio ambiente.
❌ Riesgos para la salud humana: Las bolas de naftalina liberan vapores tóxicos (naftaleno o paradiclorobenceno) que pueden causar dolores de cabeza, mareos, náuseas e irritación respiratoria, especialmente en niños y personas mayores.
❌ Peligro para los animales domésticos y la fauna: Si se ingieren, pueden envenenar a perros, gatos u otros animales, a veces con consecuencias graves. Incluso la inhalación puede resultar perjudicial.
❌ Problemas medioambientales: En exteriores, los productos químicos pueden filtrarse en el suelo y el agua, contaminando el ecosistema local y dañando a las especies beneficiosas.
❌ Ineficacia al aire libre: El viento dispersa demasiado rápido los vapores para que las bolas de naftalina mantengan un efecto repelente duradero, haciendo que los riesgos superen con creces los escasos beneficios.
Alternativas más seguras y más eficaces que las bolas de naftalina para ahuyentar a las palomas

En lugar de usar bolas de naftalina, que presentan más riesgos que beneficios, es mejor aprender cómo ahuyentar a las palomas de manera eficaz y segura.
Repelentes ultrasónicos para palomas
Los dispositivos ultrasónicos funcionan emitiendo ondas sonoras de alta frecuencia, imperceptibles para el oído humano pero muy desagradables para las palomas. A diferencia de los métodos químicos, ofrecen una solución humana y no tóxica. El PigeonChaser de Sonic Barrier es uno de los modelos más eficaces en esta categoría. Combina una tecnología ultrasónica avanzada con resistencia a la intemperie, lo que lo hace ideal para instalar en techos, balcones o jardines. Al perturbar continuamente la zona de confort de las aves, las incentiva a irse sin causarles daño.
Pinchos para palomas
Los pinchos para palomas son una barrera física comprobada que impide que las aves se posen en bordes, cornisas y canaletas. No lastiman a las palomas, sino que simplemente hacen que las superficies sean incómodas. El BirdRail es una opción especialmente eficaz. Una vez instalados, estos pinchos proporcionan una protección duradera contra el regreso de las palomas a sus lugares de descanso habituales, requiriendo muy poco mantenimiento.
Redes antiáves

La red antipalomas es ideal para grandes espacios como jardines, patios interiores o fachadas de edificios. Bloque físicamente el acceso a las zonas protegidas, al mismo tiempo que permite el paso del aire y la luz. Cuando se instala correctamente, ofrece una eficacia cercana al 100 %, especialmente para impedir la nidificación. Las redes de buena calidad son resistentes a los rayos UV y a las inclemencias del tiempo, garantizando durabilidad durante varios años.
Superficies reflectantes
Crear una confusión visual es otra estrategia eficaz para alejar a las palomas. Las superficies reflectantes dispersan la luz de manera impredecible, lo que perturba a las aves y las desanima a quedarse. El SpinScarer es uno de los mejores reflectores del mercado. Gira con el viento y produce destellos de luz que desestabilizan a las palomas, sin ruido ni productos químicos. Ligero y fácil de instalar, es especialmente eficaz en zonas soleadas como techos y jardines, donde la luz puede reflejarse libremente.
Rociadores con detección de movimiento
Los sistemas de riego con detección de movimiento detectan los desplazamientos y lanzan un chorro de agua repentino que sorprende a las aves sin hacerles daño. El JetSentinel es un excelente ejemplo. Cubre grandes superficies y solo se activa cuando hay presencia. Este método es ideal para jardines, céspedes o terrazas donde las palomas causan más molestias.
Disuasión visual
Los cebos de depredadores y los dispositivos visuales aprovechan el instinto natural de las palomas de evitar el peligro. Por ejemplo, el SilentOwl, una réplica realista de búho, hace que las palomas se muestren precavidas y evita que se instalen cerca. Colocados en ubicaciones estratégicas y movidos regularmente para evitar la acostumbración, estos dispositivos visuales alteran los hábitos de las palomas. Suelen ser más eficaces cuando se combinan con otras métodos, siendo al mismo tiempo económicos, simples y seguros.
Repelentes naturales

Para quienes prefieren un enfoque sin productos químicos, los repelentes naturales pueden ser útiles en pequeñas áreas. Olores como el pimienta, el ajo o ciertas aceites esenciales (especialmente la menta) resultan desagradables para las palomas. El vinagre también se menciona con frecuencia y muchos se preguntan: “¿El vinagre ahuyenta a las palomas?”. Su olor ácido y picante hace que algunas zonas sean menos atractivas, especialmente en bordes o balcones.
Aunque estas soluciones naturales requieren reaplicaciones frecuentes y son menos potentes que los dispositivos físicos, pueden reforzarse con un repelente ultrasónico fiable como PigeonChaser.
Preguntas frecuentes
¿Realmente odian las palomas el olor de las bolas de naftalina?
Las palomas pueden reaccionar al principio al olor fuerte de las bolas de naftalina, pero no lo encuentran insoportable a largo plazo. A diferencia de los insectos, no son muy sensibles a los vapores de naftaleno o paradiclorobenceno. En el mejor de los casos, las bolas de naftalina pueden causar una leve molestia temporal, pero este efecto desaparece rápidamente, ya que las aves se acostumbran con facilidad.
¿Es legal usar bolas de naftalina como repelente para las palomas?
No, no es legal usar las bolas de naftalina al aire libre ni para un uso distinto al indicado en su etiqueta. La Environmental Protection Agency (EPA) las clasifica como pesticidas y regula estrictamente su uso. Su empleo está permitido únicamente en contenedores cerrados destinados a proteger los tejidos de los insectos. Usarlas en balcones, jardines o techos para ahuyentar a las palomas viola la legislación federal sobre pesticidas y puede acarrear multas.
¿Son las bolas de naftalina seguras para los niños y los animales?
No, las bolas de naftalina son peligrosas para los niños y las mascotas. Contienen productos químicos tóxicos que pueden causar graves problemas de salud en caso de contacto, inhalación o ingestión. Los niños pueden confundirlas con caramelos, y los perros o gatos pueden jugar con ellas o tragarlas. Las consecuencias pueden variar desde náuseas hasta daños en órganos. Por ello, las autoridades sanitarias desaconsejan firmemente dejarlas en lugares accesibles.
¿Cuánto tiempo son efectivas las bolas de naftalina al aire libre?
Al aire libre, las bolas de naftalina pierden rápidamente su efectividad, ya que el viento y el aire dispersan sus vapores. Aunque se mantengan físicamente durante varias semanas, su efecto repelente disminuye después de unos días, o incluso horas, según las condiciones meteorológicas. La lluvia, el sol y las variaciones de temperatura aceleran su degradación química, haciendo que este método sea muy poco fiable frente a palomas persistentes que siempre regresan a sus lugares de descanso habituales.
¿Pueden las palomas acostumbrarse al olor de las bolas de naftalina?
Sí. Las palomas se adaptan rápidamente a los nuevos olores. Aunque al principio las bolas de naftalina les resulten molestas, pronto comprenden que no representan ningún peligro real. Una vez acostumbradas, el efecto disuasorio desaparece por completo. Por eso, los especialistas en control de aves señalan que los repelentes basados únicamente en el olor nunca son efectivos a largo plazo. Los métodos eficaces combinan varias estrategias, como barreras físicas (como nuestros pinchos para palomas o el cebo visual SilentOwl) o movimiento (como nuestro aspersor automático con detección de movimiento o los dispositivos ultrasónicos PigeonChaser o ZeroBird).
¿Son las bolas de naftalina lo suficientemente potentes para proteger espacios grandes como un balcón o un ático?
No. Las bolas de naftalina están diseñadas para pequeños espacios herméticos, no para áreas abiertas. En un balcón o un ático, sus vapores se dispersan demasiado rápido para generar algún efecto. Para cubrir un gran espacio, sería necesario usar una cantidad peligrosamente alta, lo que supondría serios riesgos para la salud. Soluciones como redes, pinchos o repelentes ultrasónicos son mucho más seguras y eficaces.
¿Pueden las palomas enfermarse o morir a causa de las bolas de naftalina?
Una exposición directa puede perjudicar potencialmente a las palomas, pero no es ni un método fiable ni ético. Para que una paloma enfermara, sería necesario que ingiriera las bolas de naftalina o que inhalara una alta concentración de vapores en un espacio cerrado. En cualquier caso, este enfoque es cruel y contrario a las prácticas de control responsables, que priorizan la disuasión en lugar del envenenamiento.
¿Pueden las bolas de naftalina dañar el medio ambiente si se usan al aire libre?
Sí. Al degradarse, las bolas de naftalina liberan sustancias químicas que se infiltran en el suelo y las aguas subterráneas, contaminando el medio ambiente y dañando a insectos y animales beneficiosos. La lluvia puede arrastrar estos productos hacia las tuberías, extendiendo aún más la contaminación. Estos compuestos se clasifican como peligrosos precisamente por su persistencia y toxicidad. Usarlas al aire libre no ahuyenta eficazmente a las palomas y, además, genera riesgos ambientales que se podrían evitar.
¿Las bolas de naftalina ahuyentan a otras plagas además de las palomas?
Sí, pero únicamente contra ciertos insectos pequeños. Están diseñadas para repeler o eliminar polillas, pececillos de plata y anédridos cuando se colocan en contenedores herméticos. Fuera de estos usos específicos, no son efectivas contra plagas más grandes como palomas, roedores o mapaches. Algunas personas también las prueban contra serpientes o ardillas, pero los resultados son aleatorios y no están comprobados científicamente.
Bolas de naftalina o WD-40: ¿cuál funciona mejor contra las palomas?
Ni las bolas de naftalina ni el WD-40 son soluciones fiables para alejar a las palomas. Algunas personas prueban el WD-40 en los bordes por su olor y su efecto resbaladizo, pero su acción es temporal. Lo mismo ocurre con las bolas de naftalina, cuya efectividad disminuye rápidamente al aire libre. Para quienes se preguntan si el WD-40 ahuyenta mejor a las palomas que las bolas de naftalina, la respuesta es clara: ninguno de los dos es seguro, duradero ni realmente eficaz. Los dispositivos diseñados específicamente para el control de aves, como los repelentes ultrasónicos, siguen siendo con diferencia los más efectivos.





